lunes, 23 de abril de 2012

Empecé sabiendo que ya había perdido el juego.

Tengo mas de un millón de sueños debajo de mi almohada, cuatros sonrisas baratas para regalar y demasiados vicios caros. Tengo más de seis formas diferentes de besar. Tengo a la puta rutina en mi lista negra, unos tacones altos que me hagan tocar el cielo y los doscientos días de locura guardados en un cajón. Tengo el olor de los días de verano entre las sabanas, unas medias rotas a mordiscos en el armario y mas de una decena de manías. Tengo la locura en cada poro de mi piel, unas cuantas estrellas fugaces metidas en una botella de alcohol  y un centenar de heridas decorando mi corazón.

jueves, 12 de abril de 2012

TG.

Tacones altos. Sonrisas más brillantes que las estrellas. Flashes fugaces que cruzan el lugar. Copas de más. Locuras inexplicables. Noches de desenfreno y descontrol. Días largos. Medias con mas carreras que constelaciones hay en el cielo. Vicios caros. Vestidos ajustados. Labios besados. Miradas que se cruzan. Tentaciones. Risas que vuelan alto. Momentos que recordar. Unas cuantas idiotas creyéndose las jodidas reinas de este lugar. Música a todo volumen. Amores que son de todo menos sanos. La noche es nuestra, nosotros somos esta noche.

lunes, 9 de abril de 2012

nueve.


Quizás fueron los amores de verano o lo recuerdos dolorosos que el frío invierno congelo. A lo mejor fueron los pedazos de su corazón roto, ahogados en alcohol cada noche de luna llena o puede que fueran los amaneceres en camas ajenas buscando un poco de calor. Podrían haber sido todas aquellas miradas cómplices, los besos robados por los portales de la ciudad o quizás los rayos del sol dorándole la piel en pleno otoño, mientras saboreaba unos labios desconocidos. No sé exactamente que fue lo que hizo que se quedase con esa locura tan perfecta que hace que parta la tierra en dos, con esas miradas mas profundas que el mar y con la primavera prisionera en esa puta sonrisa. Lo único seguro es que desde hace mucho tiempo es jodidamente feliz.